Mostrando entradas con la etiqueta ALIMENTACIÓN. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta ALIMENTACIÓN. Mostrar todas las entradas

martes, 9 de septiembre de 2014

Alimentación complementaria

La alimentación complementaria, a partir de los seis meses, debe iniciarse poco a poco y entendiéndolo como lo que es, es decir, algo complementario, que se añade a la lactancia y no debe suplantarla, ya que hasta el año el niño debe tomar en su mayoría leche.
Teniendo en cuenta esto, son muchos los métodos de introducción de la alimentación complementaria.

Hay una gran corriente que introduce los nuevos alimentos únicamente triturados hasta el año o incluso alargándose en el tiempo, dependiendo del niño. 
Primero se comienza con las frutas y verduras y después se añaden las carnes como el pollo, ternera, pavo, cerdo, cordero y por último, el pescado.
En los purés puedes introducir gran variedad de alimentos y asegurar la ingesta de todos juntos de forma cómoda y rápida.
Se recomienda que se realice sentado en posición vertical, para que sea adecuada y no haya problemas de atragantamiento.
Se suele recomendar un puré de verduras y carne/pescado a la hora de comer y papilla de frutas para merendar. El resto de comidas serían leche y cereales.

Hay otro método que está teniendo mucho auge en la actualidad; se llama Baby-led Weaning.
Se trata de observar la madurez del niño y tras comprobar que es capaz de sentarse sin apoyos en una trona o silla y coger cosas con sus manos sin ayuda, sentarle en la mesa con la familia a comer todos juntos, y que coma de lo mismo que comen los adultos, pero teniendo en cuenta su edad y el tamaño de los alimentos. Es decir, cuando todos coman, pondremos sobre la bandeja de la trona lo mismo pero en trozos, y siempre teniendo en cuenta las recomendaciones de edades para tomar cada alimento, y que hay cosas que no son aptas para todas las edades, como los frutos secos, el huevo o el pescado.
Usando el sentido común y comprendiendo a nuestro propio hijo, podemos llevar a cabo una introducción de alimentos paulatina y sensorial, ya que el pequeño no sólo va a probar con el gusto sino que experimentará con el tacto, tocándolos y sintiendo cómo son, observando las texturas y consistencias, ganará en la coordinación oculo-manual, tendrá mayor conciencia espacial, realizará la pinza palmar y digital para coger los alimentos, buscará con la vista los diferentes alimentos, los podrá oler y un sinfín de experiencias que le ofrecerá este método de alimentación.  

En definitiva, esta fase se trata de esto, de conocer la nueva alimentación, de probar y disfrutar, ya que lo esencial y la base es la leche y puede permitirse el no tener que comer obligatoriamente una cantidad exacta.
Podemos poner trozos de cada comida que sean fáciles de agarrar para el pequeño.
Hay que tener en cuenta que se manchará y que tratará de alimentarse solo a su modo y aunque esto no sea cómodo para la familia, es lo más enriquecedor para el propio niño, ya que aprende a comer solo y potencia su autonomía personal y aprende a alimentarse con sus manos y a llevarse solo a la boca la comida. No necesita de una comida elaborada para él cada vez que sale de casa, sino que puede comer en cualquier sitio con su familia.
También aprende a saciarse y a decir que no cuando no quiere más, sin límite de cantidad ni teniendo que comerse un plato en sí en cada comida.
Su capacidad de decisión y elección también se enriquece, ya que es él quien coge los trozos que quiere comerse y escoge los alimentos que le apetecen.
Él es quien mide lo que come y se lo lleva a la boca. Además da mayor libertad a la familia para comer todos a la misma hora juntos sin tener que esperar a que coma antes el peque.

Todo son facilidades y está claro que puede hacerse una versión mixta de la alimentación complementaria, dando purés a veces y Baby-led Weaning en otras ocasiones que lo permitan.

Lo importante es hacer del momento de la comida una experiencia agradable, apetecible y satisfactoria, donde el niño descubra los alimentos y la alimentación en familia como los adultos.

Todo en su justa medida es un éxito y cada uno debe hacer de cada método el suyo propio.
¿Cómo lo hacéis vosotros? ¿Qué os gusta más? ¿Cómo introduciste la alimentación complementaria?


domingo, 1 de junio de 2014

Caries de biberón

Hoy quiero hablaros de la caries de biberón o caries de primera infancia o caries del lactante.
Es una afección en los dientes debido al contacto de azúcares de forma prolongada en la boca al usar el biberón para dar zumos, refrescos con azúcar, infusiones u otros azúcares, como al untar el chupete en miel u otros.
Esta continua exposición de los dientes o las encías con el azúcar provocan que al estar el líquido en contacto con éstas durante tiempos prolongados, haga que las bacterias habituales en la boca conviertan el azúcar en ácido y éste disuelva el esmalte paulatinamente hasta formar la caries.
Normalmente se observan primero afectados los incisivos superiores con unas pequeñas manchitas blancas hasta que más tarde se observa la caries y se puede llegar a afectar el resto de la boca.
Para prevenir este problema, es esencial tener en cuenta unas pautas sencillas:
Los zumos u otros líquidos que contienen gran cantidad de azúcares deben darse con cuchara y no en biberón, para prevenir el contacto continuo de éstos con la boca. Así evitaremos que el líquido azucarado permanezca durante tiempos prolongados en contacto con las encías o los dientes.
Debemos dar el biberón con leche durante un rato, controlando los tiempos, sin dejarle al niño con el biberón como si fuera un juguete. Ya que la leche también contiene muchos azúcares y los niños que van continuamente agarrados a un biberón se exponen más al problema y tienen más probabilidades de padecerlo.
De igual modo no usarlo para dormirles, sino que lo empleemos durante un tiempo adecuado, ya que la leche se queda en la boca mucho rato y provoca la afección.
No untar el chupete en azúcares como miel, caramelo, leche condensada u otros. Esto hace que el alimento permanezca mucho rato dando vueltas en la boca.
Mantener una higiene adecuada a cada edad. Existen cepillos de dientes para todas las edades, incluso sólo para encías, por lo que es importante tenerlo en cuenta y limpiar las encías o los pequeños dientes con cierta regularidad para prevenir los problemas e inculcar una correcta higiene bucal.
Comenzar a usar tazas con boquilla, vasos u otros recipientes para beber desde los seis meses, introduciéndolos poco a poco para que el pequeño se acostumbre a ellos, ya que por sí mismo va a tender a usar el biberón que le resulta más sencillo.
Si observamos alguna mancha o pérdida de esmalte en la boca del niño, acudir al especialista lo antes posible para que observe y de respuesta al problema.
Varios estudios demuestran que los niños que tienen dientes de leche sanos y cuidados, tienen mayor probabilidad de tener dientes definitivos sanos y que duren mayor tiempo. 
Por todo ello, tomemos responsabilidad de la salud de la boca de nuestros pequeños y seamos consecuentes con la alimentación que les demos y el modo de dársela.

jueves, 8 de mayo de 2014

Tolerancia ante las diferentes opciones

Últimamente leo mucho en grupos y foros de crianza, padres o profesionales de la infancia, comentarios bastante contundentes respecto a ciertos temas o métodos de crianza. 
A veces creo que cada uno piensa que lo que él mismo hace es lo adecuado y lo que hace el resto no está tan bien. 
Por ejemplo, los temas de lactancia materna, colecho y porteo están a la orden del día. Son temas muy de actualidad en los que la gente es muy tajante, es decir, el que lo hace lo expresa con orgullo y defiende a muerte esta teoría e incluso hace sentir mal al que publica un comentario explicando que no practica alguno de estos métodos. 
Estoy viendo a mucha gente que es fanática de la lactancia materna exclusiva hasta tal punto que no ven bien a aquellos que dan biberón e incluso se valora si se quiere o no a un niño por dar o no el pecho. 
Respecto a estas tres decisiones en concreto (lactancia materna, colecho y porteo) creo que son opciones muy válidas pero no son las únicas y por eso debemos contemplarlas todas. 
El que da lactancia materna exclusiva o está a favor de ella, cree que todo el que quiera puede realizarla si se lo propone, a no ser que haya un problema de salud por ejemplo, pero no todas las situaciones son esta. Y el problema es cuando se afirma que todos los males de la infancia se curan con lactancia materna, ya que muchas mamás que no han podido o no han tenido ayuda ante un contratiempo con la lactancia o no han querido dar pecho, se sienten ofendidas ante estas afirmaciones ya que parece que alimentar a sus hijos de otro modo supone menos afecto y cariño hacia ellos. 
Creo que debemos ser coherentes, la lactancia materna es el alimento natural, el específico y único para tu bebé, lleno de cualidades y encima proporciona el contacto, afianza el vínculo y miles de ventajas más. Eso está claro y estamos de acuerdo en que es lo mejor para el niño. Pero ¿y si no se puede? ¿Es peor madre la que da biberones? Mucha gente cree que sí y esto es lo que me parece increíble cada vez que leo comentarios al respecto.
También sucede con el colecho o el porteo. Perdemos a veces la cabeza afirmando nuestra idea a cerca de dónde debe dormir el bebé o cómo debe portearse.
Está claro que el recién nacido hasta cierta edad (la que cada uno plantee) necesita estar cerca de sus padres y el contacto físico es muy positivo para su desarrollo afectivo e incluso neurológico, según muchos estudios, pero ¿y si una familia decide que su bebé duerma en su cuna desde que nace? ¿Y si prefieren que vaya en el cochecito? Quizás estas familias tengan otros ideales, no tengan conocimiento sobre el porteo o el colecho o sigan las normas habituales dentro de su cultura o cualquier otra cosa. 

Como profesional de la atención temprana, en muchos casos me he encontrado a familias que me han realizado preguntas sobre estos temas y cada día me doy más cuenta de que la respuesta no puede ser general sino específica para cada familia y sus necesidades, ya que habrá familias que tengan unas ideas y no quieran modificarlas y otras que acepten los consejos y prueben nuevos métodos. Y aún así la respuesta no será la misma para todos porque cada uno siente, vive, quiere o expresa de una forma distinta.
Con este largo comentario sólo quiero expresar mi malestar ante la intolerancia de unas familias hacia otras que en definitiva sólo quieren lo mismo, criar a sus hijos de la mejor manera posible. 
El respeto y la tolerancia nos enriquecen y nos hacen ver más opciones y nutrirnos de ellas. La información nos hace más ricos y es lo que nos permite escoger nuestro mejor método. 

martes, 15 de abril de 2014

Mi lactancia materna

Qué difícil es hacer entender a las anteriores generaciones que vas a darle el pecho a tu hijo a demanda y no como ellos hicieron cada tres horas.
Hay muchas madres, abuelas y gente en general, que quieren convencernos de estar malcriando al bebé por darle pecho cada vez que quiere. Incluso se llega a comentar que el bebé nos está chantajeando con el tema.
¿Cómo va a ser chantajista un niño recién nacido? Los bebes piden lo que necesitan, no tienen esa capacidad de razonamiento que se les llega a asignar. Su mecanismo es llorar para recibir la respuesta a su necesidad. Lloran porque quieren comer, por dolor, porque están sucios o porque quieren dormir, o para recibir cariño y ser calmados.
Está comprobado que cuanto más se pone a un bebé al pecho, más se estimula la producción de leche y mejor se establece la lactancia.
Sólo hay que plantearse lo que muchas veces los expertos nos dicen: ¿Qué hace cualquier mamífero cuando tiene crías? Pues les da de comer y cubre sus necesidades sin pensar en si hace mucho o poco que lo hizo anteriormente.
Yo no soy experta en este tema pero sí me considero muy interesada por él. Me he informado mucho al respecto.
Desde que decidimos tener un bebé siempre tuve claro que le daría el pecho siempre que pudiera.
Al nacer nuestra princesa perdió mucho peso y tardó más de un mes y pico en recuperarlo y debido a eso nos presionaron mucho para que complementáramos la lactancia materna con fórmula. A pesar de mi constante negativa hacia el tema, tras ver que un mes más tarde no había cogido el peso del nacimiento, decidí hacer caso a los médicos y complementar. Tuve que consultar a varios especialistas médicos para acabar haciendo lo que el primero me había dicho.
Con el sacaleches era imposible, por más que me ponía, no conseguía sacar ni para una toma completa y, la verdad que es un poco frustrante estar pegada una hora a un aparato para 60ml de leche.
Nos indicaron dos tomas al día de fórmula y por supuesto que las hicimos a demanda y sin obligarla. La peque las cogía con ansia, como si no hubiera comido nunca... Esto me hacia pensar en si estaríamos o no haciéndolo bien... A su vez fuimos a un grupo de apoyo a la lactancia que nos ayudó muchísimo; gracias a ellos la colocación fue la correcta, los dolores desaparecieron y el apoyo fue muy necesario y me animó mucho a continuar intentándolo.
Pero aunque veíamos a la princesa cada día más grande, el peso tampoco es que aumentara rápidamente. De lo que parecía ser un remedio puntual (complementar unos días o algunas semanas con fórmula) a ser algo necesario para ella y su crecimiento.
Aquí llega el debate con uno mismo sobre si lo que importa es el peso o lo sano y activo que ves tu a tu hijo... Pero pecas de inexperta y piensas que es tu responsabilidad y no es un sólo especialista el que te ha aconsejado, sino tres o cuatro.
A pesar de usar biberones específicos para niños que sólo toman pecho, mi princesa se fue acostumbrando al biberón y aunque podía habérselo quitado, creo que ella también disfrutaba mucho con esas tomas de fórmula por mucho que a mí me pesara.
Ella ha sido quien ha decidido finalmente cuánto tomar de cada tras la situación que se le impuso al inicio y, yo me he adaptado a ella porque creo que es esencial respetar su adaptación en este proceso que quizás también ha sido complicado para ella.
Ahora tras cuatro meses de lactancia mixta, la princesa ha dejado el pecho y parece no querer tampoco la fórmula y hemos tenido que comenzar con cereales y con fruta. Llegados a este punto creo que lo que no le gusta es la leche y que prefiere un buen cocido antes que seguir siendo lactante!
Si ya era sensible con este tema, mi vivencia me ha hecho ser aún más partidaria de la lactancia materna y respetar el tema y cada caso siendo prudente y sin hacer juicios de valor sin conocer y aún conociendo cada situación.

miércoles, 16 de octubre de 2013

BABY-LED WEANING

A partir de los seis meses, los bebés comienzan a tener una dieta más variada, donde se van introduciendo nuevos alimentos normalmente a través de papillas y purés. Hasta ahora todo había sido leche.
Lo habitual es seguir los consejos de nuestro pediatra o nuestro propio criterio consultando a conocidos o amigos con bebés.
Lo más común es ir probando alimentos poco a poco e ir introduciendo los nuevos para ver si existen alergias o intolerancias.
He descubierto un nuevo método para mí, que está tomando fuerza en esta realidad en la que vivimos, en la que estamos tendiendo a lo natural, a dejar que el niño elija, escoja, explore e investigue con sus sentidos por sí mismo. El método de la demanda por parte del niño.
Este método es BABY-LED WEANING    http://www.babyledweaning.es/, es el llamado destete dirigido por el bebé. Se resume en poner al niño sentado erguido junto a la mesa de los adultos cada vez que éstos coman, y dejar comida sana a su alcance de la que estén comiendo ellos y que el bebé vaya cogiendo con sus manos dicha comida a demanda, la huela, la mire, la toque, explore con su tacto, vista, olfato y sobre todo, con su gusto. Que vaya probando con sus manos la comida y elija aquellas que le vayan gustando más. De este modo empezará a probar nuevos alimentos por sí mismo, sin presión por la cantidad que coma, ni la variedad.
Según el método, esto hace que acepten los nuevos alimentos y la nueva forma de alimentarse como algo positivo y no como una pelea que a veces se forma entre padres e hijo ante la nueva forma de alimentarse.

Aquí os dejo esta información para que con ella cada uno decida cómo ir haciéndolo. En en enlace que os dejo de la página hay más información.